EL NIÑO INTERIOR Y SU LUNA EN CAPRICORNIO
LA LUNA EN CAPRICORNIO :
Seguimos con la décima entrega del niño interior y hoy toca hablar desde la posición de Capricornio. Antiguamente se decía que las lunas Capricornio eran frías porque el regente de Capricornio es Saturno. Debido a la tierra, esta Luna es muy sensitiva y debido al principio cardinal está dotada de voluntad y poder, por lo tanto, es una Luna que puede procurarse lo que necesita. En este caso, el amor suele estar unido a una finalidad objetiva puesto que Capricornio tiene siempre alguna meta que conseguir. No es una Luna espontánea que se dirija a otras personas sin una razón fundada. Su yo emocional exige seguridad y, por eso, prueba al tú durante mucho tiempo hasta que está segura de que todo está en orden y no hay posibilidad de engaño. Los criterios formales como el status, la carrera, la profesión y los ingresos juegan aquí un papel muy importante. Una Luna Capricornio necesita casi siempre una razón objetiva para establecer contacto. Le resulta difícil comprender el amor por el amor en sí. Capricornio, como signo de la individualidad, sabe cual es su valor desde el punto de vista emocional y se vende muy caro. Es una Luna individualizada que no se deja enganchar por metas ajenas sino que siempre quiere escoger y decidir por sí misma. Es muy realista y mira las cuestiones emocionales y el amor con objetividad.